Ayer se
hicieron públicos los datos financieros del club pertenecientes al último año
fiscal en el que el club ha obtenido un beneficio después de impuestos de
730.000€ (1,86 millones de euros antes de impuestos). Parte de estas ganancias
se debe a un aumento de los ingresos, que alcanzaron los 30,73 millones de
euros, mientras que el año anterior fue ligeramente inferior, apenas
sobrepasando los 30 millones (30,06 para ser más exactos).
“Estamos
muy contentos con el resultado y hemos sido capaces de lograr al final de
nuestro mandato, por cuarta vez consecutiva, un resultado positivo. Se ha estabilizado el club económicamente en
los últimos años y se iniciaron importantes proyectos de infraestructura. En
las tres últimas temporadas hemos reportado un beneficio antes de impuestos de
6,55 millones de euros, lo que subraya la fuerza económica de nuestra
asociación” afirmó el presidente Stefan Orth.
Los
ingresos aumentaron en el último año especialmente en el área de venta de
entradas, en lo que ayudó la finalización de la Gegengerade del estadio. “El
desarrollo del club y su estabilidad económica son muy alentadores, pero aún
nos enfrentamos a grandes desafíos. La construcción de la grada norte y la
finalización de la renovación de estadio, así como la construcción de una
estación externa para la policía”, dijo Michael Meeske, director comercial de
la asociación.
El
vicepresidente del St. Pauli, Tjark Woydt, se tornó moderado en vistas a volver
a alcanzar un saldo positivo de cara al próximo año fiscal debido a “la pérdida
de ingresos por entradas a causa de la construcción de la Tribuna Norte”.
